Este artículo presenta las reflexiones en relación al rol investigador en el marco de una experiencia de Investigación Acción Participativa (IAP) realizada desde el equipo configurado por investigadoras del Departamento de Trabajo Social y Sociología de la Universidad de Deusto en el campus de Donostia/San Sebastián. La IAP es una metodología capaz de generar dinámicas relacionales y prácticas de reciprocidad, que posibilita vincular la investigación en Trabajo Social con la práctica profesional, superando la posible dicotomía entre ambas dimensiones.
El equipo de investigadoras de Trabajo Social ha configurado un contexto relacional, al que denominamos ágora, para generar conocimiento compartido y potenciar después la sistematización de la práctica. Este espacio se visualiza como propicio para reunir a diferentes actores y pretende enmarcar y definir problemas sociales, así como generar relaciones de confianza y colaborativas que permitan negociar lo que va a ser considerado como una solución probable.
Los principios metodológicos para la construcción del ágora han sido los siguientes: la co-generación de conocimiento; entender el proceso como emergente, y el respeto a la participación y a las aportaciones de todos y todas.
Este artículo pretende poner en valor, desde una experiencia concreta, el Trabajo Social en su dimensión investigadora, desgranando el proceso metodológico que ha propiciado que investigadores y profesionales participen en nuevas modalidades de colaboración, e identificando las funciones del actor investigador en el proceso, funciones que posibilitan la generación de sinergias y el diseño de propuestas de buenas prácticas en el ámbito de la inclusión.