Resumen
La atención a las personas enfermas en procesos de final de vida incluye el acompañamiento profesional de sus familiares. La enfermedad aparece en un momento determinado del ciclo vital familiar y exige una adaptación brusca a la nueva situación y a las exigencias que emergen de las nuevas necesidades a cubrir. El sistema familiar se vuelve más vulnerable cuando uno de sus miembros sufre y se contempla la posibilidad de su muerte. La tarea del trabajador social se debe centrar en el impacto y en las repercusiones que la enfermedad produce y atenderlos entendiendo y respetando las actitudes, las creencias y los estilos de vida de las personas enfermas y de sus familiares.