Resumen
La muerte de un hijo, como final de un proceso de enfermedad o fruto de un accidente, provoca una disrupción en el sistema familiar del niño, tanto a nivel estructural como a nivel funcional; por este motivo, el apoyo informal y profesional será imprescindible. El trabajador social sanitario está formado en su práctica asistencial para intervenir y acompañar en las pérdidas desde el modelo psicosocial, dando una visión social dentro del equipo asistencial sanitario. Visión que acontece fundamental para tratar cada situación de una forma integral e interdisciplinaria.