Los servicios sociales de atención primaria tienen varias metodologías para atender a los ciudadanos que se ponen al alcance de las necesidades detectadas y del diagnóstico que sea necesario hacer.

Este artículo presenta una experiencia de trabajo comunitario en una zona concreta de Barcelona, la Zona Norte de Nou Barris, que tiene unas características concretas y en la que el trabajo en red y conjunto entre servicios ha sido un valor propio de la zona, que ha permitido intervenir en la realidad social de una manera más global. Fruto de esta apuesta, se crea el Plan Comunitario de la Zona, con el objetivo de unir esfuerzos de profesionales, servicios, entidades y vecinos para mejorar el bienestar de los ciudadanos del territorio.

Con la llegada de nuevos vecinos provenientes otros países, se planteó la afectación que tenía en los servicios, las entidades y en el territorio, y la necesidad de crear un espacio de reflexión, participación y acción que derivó en la constitución de la Tabla de Inmigrantes, en la cual participó un profesional del centro de servicios sociales. Esta situación también puso en evidencia la necesidad del equipo de trabajo del centro de validar esta iniciativa como una alternativa útil para su praxis diaria. Finalmente, se pretende aportar una mirada práctica sobre la oportunidad que puede tener un proceso de participación ciudadana para ofrecer una mirada conjunta y un abordaje diferente a las necesidades sociales.